El cambio climático y su impacto en la agricultura

como afecta el cambio climatico a la agricultura

El cambio climático es una de las máximas preocupaciones de las últimas décadas, ya que está afectando a nuestro planeta de diversas maneras. Uno de los sectores más afectados por este fenómeno es la agricultura, que es también una de las causantes del cambio climático a nivel mundial. En este artículo, analizaremos cómo el clima interviene en la agricultura, el impacto del cambio climático y cómo se están enfrentando a este desafío. ¿Listos para adentrarnos en un futuro más verde? ¡Vamos allá! ?

El clima y su importancia en la agricultura

El clima es un factor fundamental en la agricultura, ya que determina las condiciones de producción. Por ejemplo, la temperatura afecta la tasa de desarrollo de la planta en todas sus etapas y, por lo tanto, influye en los rendimientos. Además, las precipitaciones y los niveles de humedad influyen en la cantidad de agua disponible y el riesgo de plagas.

Con el cambio climático, se están presentando condiciones atípicas durante todo el año, como el exceso de humedad y temperaturas inusualmente altas, que atraen plagas y provocan la necesidad de usar insecticidas. Las plantas son sensibles tanto a la falta de agua como al exceso de ésta y, en ambos casos, pueden morir. ? No cabe duda de que el cambio climático afecta a la agricultura creando condiciones tan severas que la agricultura se convierte en una odisea.

Adaptación al cambio climático en la agricultura

Para enfrentar esta realidad, se están implementando medidas de adaptación al cambio climático en la agricultura, las cuales tienen que adaptarse a cada caso particular. Algunos ejemplos son la selección de especies más tolerantes a los cambios drásticos de temperatura y a la falta o al exceso de agua, y el uso de tecnología aplicada a la agricultura.

Una herramienta útil en este sentido es la EOSDA Crop Monitoring, una plataforma en línea que aporta valiosos datos agrometeorológicos como la previsión meteorológica diaria para los próximos 14 días, datos históricos de la región y datos de estrés por frío y estrés térmico. Esto permite a los agricultores tomar decisiones informadas para enfrentar los cambios en el clima.

Asimismo, el drenaje compatible con el ecosistema es crucial para mantener el equilibrio hídrico y evitar el riesgo de inundaciones y sequías que pueden ser perjudiciales para la agricultura.

Impacto en América Latina y el Caribe

Un artículo reciente evaluó el desempeño del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en la mitigación y adaptación al cambio climático en la agricultura, los recursos hídricos, la silvicultura y el uso de la tierra en América Latina y el Caribe (ALC). Se encontró que entre 1990 y 2010, el área agrícola en ALC ha aumentado en 52 millones de hectáreas, mientras la tierra boscosa ha disminuido en 93 millones de hectáreas.

Estos procesos, junto con las prácticas agrícolas tradicionales y el uso de la tierra, representan casi la mitad de las emisiones globales relacionadas a la agricultura y a cambios en el uso de la tierra en la región. Además, la mayoría de las emisiones agrícolas provienen del metano emitido por el estiércol y los procesos digestivos del ganado.

Por otro lado, algunos enfoques como la adopción de prácticas agrícolas de cero labranza y la reforestación o preservación de los bosques pueden ayudar a capturar carbono de la atmósfera y almacenarlo en la tierra y los árboles. Esto contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y a combatir el cambio climático.

Riesgos y desafíos para América Latina y el Caribe

El cambio climático presenta un riesgo para la agricultura y los recursos naturales de ALC, especialmente para las poblaciones pobres e indígenas que viven en las zonas rurales. ¿Qué mejor razón para cuidar el ambiente que proteger a quienes más lo necesitan, ¿verdad?

En números, el BID, durante el periodo 2004-2013, aprobó 73 préstamos y 149 cooperaciones técnicas no reembolsables por un total de US$3.1 mil millones en actividades relacionadas al cambio climático para los sectores de agricultura y recursos naturales. Los préstamos relacionados a la adaptación representan la mayor porción: un 77% de los recursos aprobados.

Al mismo tiempo, la cartera del BID para la mitigación del cambio climático es relativamente pequeña, ya que la agricultura y los recursos naturales son sectores que aportan una importante contribución a las emisiones de GEI. Aún así, el número de operaciones ha aumentado en los últimos años y se espera que siga creciendo en el futuro.

Conclusiones

El cambio climático está afectando negativamente a la agricultura en todo el mundo, y especialmente en regiones como América Latina y el Caribe. Sin embargo, también existen estrategias como la adaptación y la mitigación, que pueden contribuir a enfrentar este desafío de forma conjunta y sostenible.

Las opciones normativas deben incluir incentivos financieros para reducir la deforestación y la degradación, y la promoción de fuentes de energía renovable. Asimismo, se debe adoptar un enfoque general, un marco regulatorio equitativo y metas intermedias para reducir las emisiones de GEI y fomentar el desarrollo sostenible. De esta manera, podremos hacer frente al cambio climático y asegurar la continuidad de la agricultura para las futuras generaciones. ?

Después de todo, como dicen acertadamente en la famosa película mexicana “Nazarín”: “La vida no es como se vive, sino como se recuerda y cómo se recuerda para contarla”. Y en nuestras manos está decidir cómo queremos recordar nuestra lucha contra el cambio climático y cómo queremos contarla. ¡Juntos, lo lograremos! ?