¿Qué es la yaca y cómo se utiliza como planta medicinal?

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Proveniente de Asia y hallando un hogar en el paisaje mexicano, la yaca se destaca por su versatilidad y riqueza alimenticia. Asentada en el estado de Nayarit durante los años 80 por los estadounidenses Nicholas Welberg y Robert Grant, esta fruta se ha adaptado con éxito al clima y suelo mexicanos, enriqueciendo tanto la dieta local como la economía. Con un peso que puede superar los 25 kilogramos, su consumo se extiende desde consumirla fresca hasta transformarla en licuados, aguas frescas, helados, y hasta las semillas son aprovechadas tras ser hervidas, sirviendo como botana. Según Doña Magdalena Santa María, encargada de un plantío en San Luis de la Loma, la yaca no solo es apreciada por su “sabor que recuerda a frutas tropicales”, sino también por sus propiedades nutritivas, destacando entre ellas su capacidad para mejorar la inmunidad y la digestión. Este interés creciente ha propulsado a sus cultivadores a promoverla en eventos agrícolas locales, reconociendo su potencial saludable avalado incluso por la Organización Mundial de la Salud.

Cuáles son los beneficios y propiedades de la yaca

La yaca, destacada en el canal Cocina Fácil Conmigo, se presenta no solo como una fruta exótica con un sabor único y dulce, sino también como un reservorio de beneficios para la salud. Originaria de las selvas tropicales de Asia y cultivada en lugares como Nayarit, México, este fruto se distingue por ser uno de los más grandes del mundo, llegando a pesar hasta 50 kilos. Pero lo que verdaderamente la hace especial son sus numerosas propiedades: es baja en azúcar y rica en minerales esenciales como el hierro y el calcio. Además, su alto contenido de carotenos, fitoesteroles, polifenoles y una amplia gama de compuestos biactivos le otorgan cualidades antioxidantes, antiinflamatorias, anticancerígenas, antibacterianas, antineoplásticas (previene el desarrollo de células tumorales malignas), hipoglucémicas y cicatrizantes. Las implicaciones de estos componentes son vastas, contribuyendo a la reducción del riesgo cardiovascular mediante la disminución de niveles de colesterol alto y triglicéridos elevados en la sangre. “Esto no tiene nada de ciencia, nada más es untarse el aceite para que no se te peine la mano”, así lo describe Angy Flores al explicar cómo abrir la fruta, subrayando la simplicidad y accesibilidad en la preparación de la yaca para el consumo.

Propiedades Nutricionales de la Yaca

La yaca, desconocida por muchos pero un tesoro para quienes conocen sus beneficios nutricionales, se alza como un gigante en el mundo de las frutas por su composición rica y diversa. En su pulpa, encontramos una concentración significativa de potasio, manganeso, cobre, magnesio y vitaminas A y C, esenciales para el mantenimiento de una salud óptima. La vitamina A, con un aporte de aproximadamente 500 UI por cada 100 gramos de carne, es vital para la salud ocular, mientras que la vitamina C, con 11 mg/100 g, fortalece el sistema inmunológico.

Las semillas de la yaca no se quedan atrás; son una fuente robusta de carbohidratos, similares a las castañas, y proveen una dosis alta de vitaminas B1 y B2. Estos nutrientes son fundamentales para la energía y el metabolismo celular. Además, la fruta es rica en riboflavina y B6, coadyuvantes en el proceso de generación de energía y en la producción de neurotransmisores, respectivamente. La yaca, por tanto, no solo es un deleite al paladar sino un complemento nutricional de valor incalculable. “La yaca es más que una fruta; es una fuente compacta de nutrición y salud”, afirman expertos en dietética y nutrición, resaltando su rol indispensable en dietas balanceadas.

¿Qué enfermedades cura la semilla de yaca?

Desde la perspectiva de NutriCiencia S.A., un canal enfocado en las propiedades de alimentos orgánicos, se destaca la yaca por su diversidad nutricional y potencial terapéutico. La semilla de este fruto, en particular, es resaltada por su riqueza en fibra dietética, lo que la convierte en una opción recomendada para combatir problemas digestivos y el estreñimiento. Además, su contenido de magnesio apunta a ser beneficioso en la prevención y manejo de hipertensión, diabetes y enfermedades cardíacas. No menos importante, el calcio presente en la yaca contribuye a una menor probabilidad de osteoporosis. De manera singular, el fruto contiene sildenafil, el mismo componente activo encontrado en el viagra, otorgándole propiedades para mejorar la circulación sanguínea. “Por ello es considerado como viagra natural”, subrayan desde NutriCiencia S.A., enfatizando en los cuidados necesarios en su consumo, especialmente previo a cirugías o en casos de reacciones adversas.

¿Qué parte de la yaca se come para fines medicinales?

Desde el corazón de Puerto Rico, el canal de YouTube Back to the Garden PR comparte su pasión por una alimentación saludable utilizando frutas locales como la yaca, también conocida en inglés como jackfruit. Se resalta su utilidad en diversos preparados, con un enfoque particular en las partes comestibles y beneficiarias para la salud. La parte principal de la yaca que se consume para fines medicinales y nutricionales son sus pedazos amarillos o pods, sumamente ricos y descritos por el creador del contenido como una combinación entre piña y mango, e incluso comparable al sabor de un chicle de bubblegum. Esta fruta se puede disfrutar fresca, pero también ofrece numerosos beneficios al ser deshidratada, conservando sus propiedades y convirtiéndose en un snack alto en calorías pero saludable. Además, la pepa que se encuentra dentro de estos pods se identifica como otra sección comestible, que tras ser hervida, resulta ser sabrosa, aportando así flexibilidad y variación al consumo de yaca.

Mmm. Mmm. Esta está bien rica. También se consume la pepa que está aquí dentro. Esta pepa se hierve y son sabrosas. Miren esta hermosura.” —destaca el canal, subrayando la versatilidad de la yaca, y cómo cada parte de esta fruta puede ser aprovechada, no solo satisfaciendo el paladar sino también contribuyendo a la salud gracias a sus altos valores nutricionales.