Adentrarse en el mágico universo de los murales prehispánicos de México es una experiencia sin igual. Nos permiten descubrir los secretos que se esconden tras las coloridas pinturas y comprender la cosmovisión de las antiguas civilizaciones mesoamericanas. Pero, ¿cómo es que hemos llegado a conocer tanto acerca de estas obras maestras del arte antiguo? La respuesta se encuentra en la mezcla del conocimiento de sus técnicas y en el uso de la tecnología moderna.
Los secretos de la técnica pictórica prehispánica
El estudio de la técnica pictórica en estos murales es una tarea fascinante que nos revela información sobre cómo se hicieron, qué materiales se utilizaron y cómo se aplicaron. Un ejemplo de ello es el proceso de aplicación de la pintura mural, la cual se realizaba sobre superficies de enlucido de cal o arcilla. En el contexto mesoamericano, estos murales eran creados mediante una serie de pasos detallados y específicos para garantizar la belleza y durabilidad de sus obras.
Las culturas mesoamericanas desarrollaron tecnologías para mejorar sus propiedades de fraguado, como el uso de la cal, una materia prima fundamental en la construcción de sus ciudades y edificios. De hecho, en el sitio arqueológico de Cacaxtla, se observa una clara diferenciación en los materiales utilizados en los revestimientos, lo cual tiene un significado simbólico que nos ayuda a entender el concepto del espacio como una cueva.
La fotografía: aliada para el registro del arte prehispánico
Desde la segunda mitad del siglo XIX, la fotografía se ha convertido en una herramienta fundamental para el registro, conservación y estudio del patrimonio cultural. Viajeros extranjeros como Claude-Joseph-Désiré Charnay, Lord Alfred Percival Maudslay y Teobert Maler dejaron testimonios visuales de los vestigios de las culturas prehispánicas de México, gracias al avance tecnológico de la época.
Entre 1850 y 1900, estos estudiosos extranjeros plasmaron en diversos formatos fotográficos imágenes de la arquitectura y escultura de sitios arqueológicos del país. Sus hallazgos y descubrimientos se concentraron en álbumes fotográficos, a través de los cuales tenemos un valioso registro científico de la herencia cultural de las civilizaciones mesoamericanas.
El proyecto “La pintura mural prehispánica en México”
A pesar de la importancia de estos murales, durante mucho tiempo fueron olvidados por los investigadores. Sin embargo, en 1990 se creó el proyecto La pintura mural prehispánica en México por la doctora Beatriz Ramírez de la Fuente, del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM. Los objetivos del proyecto incluyen estudiar y comprender la pintura, preservar su memoria histórica y hacer conciencia de su valor.
Este proyecto es una herramienta para entender a las civilizaciones antiguas desde disciplinas tan diversas como la historia del arte, la biología, la astronomía, la epigrafía, el dibujo y la fotografía. En él se utiliza la fotografía como medio de registro, fuente de información y método de conservación de las valiosas pinturas murales prehispánicas.
La tecnología digital en el registro del arte prehispánico
El registro de las pinturas murales prehispánicas se ha realizado tanto con cámaras analógicas como digitales, siendo estas últimas las que producen imágenes de alta resolución y fidelidad de color, permitiendo la reproducción en escala 1:1 de las pinturas. Un caso de éxito en el proyecto es la reproducción del mural del Tlalocan que se localiza en Tepantitla, Teotihuacan.
El proceso de registro in situ de estos murales es meticuloso, ya que se realiza con cámara digital y cabezal robótico para asegurar una correcta exposición y reproducción del color. Además, se utiliza software especializado para corregir la distorsión de lente y crear los perfiles de color para ajustar el balance de blancos. Todo esto permite una visualización y análisis en detalle de cada uno de los motivos representados en el mural.
El futuro de la investigación y conservación de los murales prehispánicos
A medida que la tecnología avanza, las oportunidades para seguir descubriendo y conservando los murales prehispánicos de México se multiplican. Es importante que sigamos trabajando y colaborando para garantizar la protección y el estudio de este invaluable tesoro artístico y cultural que nos legaron nuestros antepasados.
Así que la próxima vez que te encuentres frente a uno de estos murales llenos de vida, recuerda que no solo estás viendo una obra maestra del arte antiguo, sino también el resultado de siglos de conocimiento y la aplicación de la tecnología moderna para su descubrimiento y conservación. Ser consciente de ello te permitirá disfrutar aún más de las maravillas que nos ofrecen los murales prehispánicos de México.